Durante el tercer día de la operación de desmantelamiento del campamento de ‘la jungla’ de Calais, antes de terminar el día, más de 4.200 personas habían sido trasladadas a diferentes centros de acogida de solicitantes de asilo repartidos por toda Francia.
En concreto, 1.500 fueron llevados a una instalación situada en ‘la jungla’. Tras ser examinados por las autoridades francesas y británicas, entrarán en un programa de reunificación familiar en Reino Unidos o enviados a un centro de acogidas de menores en territorio francés.
Ahora, 450 mujeres y menores están acogidos en un centro diferente ubicado también en Calais.
El representante del gobierno local, la prefectura del norte de Calais, indicó el miércoles por la tarde que el campamento estaba vacío y que el desmantelamiento había concluido.
También precisó que no estaba previsto que partieran nuevos autobuses de Calais para trasladar a migrantes, refugiados y solicitantes de asilo desde el campamento.
Sin embargo, esa misma tarde aún había cientos de personas en ‘la jungla’, incluyendo docenas de menores que no habían accedido al hangar donde se procedía al proceso de registro e identificación.
Y es que las autoridades francesas detuvieron el procedimiento de registro de menores cuando las capacidades de alojamiento para menores se llenaron.
Al atardecer, decenas de menores no acompañados vagaban por la zona sin saber dónde podrían pasar la noche. Mientras, varios incendios provocados devastaban ‘la jungla’.